Este cortometraje tailandés narra la historia de Lalin, una chica que tiene miles de seguidores en Instagram, gracias a lo bella que luce en todas sus fotos. Sin embargo, todo era una mentira, ella editaba su rostro, para conseguir la aceptación de las personas, al menos en el mundo virtual.
Lalin padecía acné y odiaba la imagen que le devolvía el espejo, por eso no toleraba verse sin la mascarilla que siempre le cubría la mitad del rostro, hasta que un día, tuvo que enfrentarse con el mundo real y descubrir su belleza real, que sin que ella se diera cuenta ya había conquistado a alguien.
Un documental que nos hace reflexionar acerca del mundo de apariencias en el que vivimos y del mundo ficticio que nos permite crear las redes sociales. Este video nos regresa a la realidad y nos muestra cómo la belleza de las personas va más allá de la apariencia física y aunque no nos demos cuenta, alguien será capaz de apreciar la belleza real.