Esta crisis política sin precedente en la historia de Guatemala tuvo lugar en una agitada semana en la que Otto Pérez Molina fue despojado de su inmunidad.
Otto Pérez Molina, ahora ex presidente de Guatemala, dijo que "no confía en la justicia de Guatemala", que "está llegando con desventaja a los tribunales".
El retiro de la inmunidad no remueve a Otto Pérez Molina de la presidencia de Guatemala, y sólo permite que se le procese como a cualquier otro ciudadano.