Para salvarnos en las emergencias es importante considerar tener a la mano una mochila con objetos útiles durante una catástrofe. Mismo que nos podrán ayudar durante las primeras 72 horas.
La mochila de emergencia, primero que nada debemos considerarla como nuestra salvación individual, cada miembro de la familia debe tener la suya sin importar que vivan en la misma casa.
Protección Civil y organizaciones de rescatistas como los Topos llamaron a la población a estar alertas y tener una mochila preparada en caso de alguna contingencia.
Debemos estar prevenidos para cualquier desastre natural que se pueda presentar ya que por ejemplo los sismos no pueden predecirse por lo que es importante tener una mochila de emergencia.
Las características de la mochila de emergencia El material de la mochila debe ser impermeable, de costuras anchas y que no sea tan grande para que se pueda mover con libertad los brazos.
Esto es lo que debemos tener en nuestra mochila de emergencia:
- Documentos más importantes: Acta de nacimiento, matrimonio, pasaporte, licencia, credencial del servicio de salud como IMSS o ISSSTE, pólizas de seguros, escrituras, documentos bancarios, INE, lo mejor es guardarlos en un fólder o bolsa de plástico.
- Agua embotellada de 1 litro.
- Alimentos: 4 raciones de comida empaquetada o enlatada y no perecedera, con abre fácil y ligera, en caso de tener mascotas también prever una ración para ellos.
- Lámparas (de preferencia led) con pilas colocadas y de repuesto.
- Un radio para monitorear las noticias enAM y FM con pilas de repuesto o de base de dínamo.
- Silbato ya que ser de mucha ayuda en caso de que estés en riesgo.
- Navaja con múltiples funciones.
- Agenda de papel con números de emergencia, de familiares y amigos.
- Celular, mantenerlo siempre cargado y guarda una pila portátil.
- Botiquín de primero auxilios.
- Una muda de ropa interior.
- Manta aunque sea ligera y térmica de ser posible.
- Un duplicado de llaves de casa y automóvil.
- Dinero en efectivo, en una emergencia es difícil que sirvan los cajeros o terminales bancarias.
- Artículos de higiene personal: pasta y cepillo dental, jabón, papel higiénico y toallas sanitarias.