El gobierno de Zimbabue anunció que solicitó a las autoridades de Estados Unidos la extradición del dentista estadounidense Walter Palmer, responsable de la muerte del león Cecil, el animal más popular del Parque Nacional de Hwange y de ese país africano.
La petición de Zimbabue tiene lugar en medio de severas críticas e indignación alrededor del mundo por la caza ilegal del león más querido en Zimbabue, y por la forma en que el dentista lo mató a principios de este mes.
Walter Palmer, de 55 años, pagó 50 mil dólares para cazar un león en Zimbabue, pero esa práctica es ilegal, por lo que debe ser extraditado para que se haga responsable de sus acciones, declaró el ministro zimbabuense de Medio Ambiente, Oppah Muchinguri.
De acuerdo con los reportes, el león de 13 años fue atraído con una carnada fuera de la zona de protección del parque Hwange, y una vez allí, Palmer le disparó flechas con un arco, causando serias heridas a Cecil, que aún así intentó escapar.
Más tarde, el felino -que era la principal atracción del parque y parte de un proyecto de investigación de la Universidad de Oxford– recibió un disparo con arma que lo mató. Posteriormente le quitaron la piel y le cortaron la cabeza como trofeo de caza.
En cuanto fue encontrado el cuerpo de Cecil, la policía inició la búsqueda de los responsables, pero desafortunadamente ya era demasiado tarde para arrestar al cazador furtivo, pues ya había huido a su país de origen, señaló el ministro de Medio Ambiente.
Esta semana el dentista estadounidense Walter Palmer admitió haber matado a Cecil, pero dijo desconocer que fuera tan famoso y afirmó que actuó pensando que la cacería era legal, por lo que pidió disculpas. El gobierno de Estados Unidos también está llevando una investigación sobre lo sucedido.