El ministro nigeriano de Información, Labaran Maku, descartó que las niñas permanezcan en el bosque de Sambisa, en el norteño estado de Borno, refugio y base de operaciones de Boko Haram, pero también rechazó las versiones de que hayan sido llevadas fuera de Nigeria.
No hay indicios que demuestren que nuestras niñas están todavía en el bosque. Tampoco hay indicios de que hayan sido sacadas fuera del país, declaró Maku en una entrevista televisada y reproducida por el diario nigeriano The Punch.
Las labores de búsqueda del Ejército nigeriano se han centrado en el bosque de Sambisa, sin embargo no han encontrado ninguna pista, por lo que Maku señaló que hay posibilidades de que las niñas hayan sido divididas en varios grupos distribuidos por toda Nigeria.
Respecto a las versiones de que los secuestradores trasladaron a las adolescentes a Camerún y la República Centroafricana, el ministro de Información de Nigeria dijo que no hay pruebas que lo demuestren.
Maku aprovechó la entrevista para exhortar al gobierno nigeriano a que negocie la liberación de las niñas secuestradas con Boko Haram, que lucha por imponer la sharía o ley islámica en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.
El pasado 14 de abril, miembros de Boko Haram, cuyo nombre significa en lengua local la educación no islámica es pecado, atacaron una escuela secundaria de Chibok, de donde secuestraron a 276 alumnas, de la cuales 53 lograron escapar, pero 223 siguen secuestradas.
El Ejército nigeriano, apoyado por aviones y militares estadunidenses especializados, ha intensificado la búsqueda de las menores, operación que cada día suma más refuerzos internacionales.
Este martes, Israel envió expertos en inteligencia a Nigeria para sumarse en la búsqueda de la estudiantes, mientras el avión de vigilancia enviado por Reino Unido el domingo pasado para el mismo objetivo se vio forzado a aterrizar en Senegal debido a una falla técnica.