Estados Unidos y sus aliados árabes lanzaron varios ataques aéreos contra zonas donde se concentraban los extremistas del EI en la periferia oriental y suroriental de Kobane, informaron fuentes kurdas y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Los aviones de la coalición atacaron también anoche las afueras de Kobane, donde los yihadistas han logrado avanzar hasta menos de tres kilómetros de esa ciudad, ubicada en la provincia de Alepo, según comandante de las fuerzas kurdas.
La coalición árabe-estadounidense realizó al menos cinco ataques aéreos contra las posiciones yihadistas en la línea del frente donde luchan contra los kurdos, al este y al sureste de Kobane, indicó el OSDH, que cuenta con una amplia red de activistas en Siria. Al menos 10 personas murieron -nueve kurdos y un yihadista- en cruentos combates librados por milicias kurdas y yihadistas en torno a Kobane.
Los combatientes del EI se encuentran a menos de tres kilómetros de Kobane, ciudad de la que quieren apoderarse para controlar una larga franja de territorio a lo largo de la frontera con Turquía.
Ante la cercanía de los yihadistas a su territorio, el gobierno turco desplegó la víspera unos 35 tanques y vehículos blindados en una colina a pocos kilómetros de la ciudad de Kobane, asediada por los yihadistas
Turquía, que en principio se mostraba reticente a participar en una intervención militar contra los yihadistas, solicitó este miércoles al Parlamento autorización para poder enviar tropas a Irak y Siria, así como para permitir el uso de sus bases militares a otros países.
En el texto enviado por el Ejecutivo al Parlamento, que será debatido mañana jueves, se justifica la petición por los riesgos y amenazas a los que se enfrenta Turquía y que amenazan su seguridad nacional.
Si el Parlamento da luz verde, Turquía se sumará a la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, en la que participan, con diversos grados de implicación, unos 50 países para combatir al autodenominado Estado Islámico
Estados Unidos y sus aliados árabes comenzaron el pasado 23 de septiembre una campaña aérea contra los yihadistas en el norte y este de Siria, con el objetivo de golpear y erradicar al grupo extremista, que controla territorio en ambos lados de la frontera entre Siria e Irak.