Ante el riego de que las baterías de las cajas negras, que duran en promedio 30 días, se agoten y dejen de emitir señales, los equipos de rescate trabajan este martes contra reloj en la localización de nuevas señales, con apoyo de un sumergible, aunque lamentablemente sin éxito.
El Centro de Coordinación de la Agencia Mixta, creada por las autoridades australianas para coordinar las operaciones de búsqueda, confirmó que 11 aviones militares, tres civiles y 14 barcos participan en la misión, aunque ninguno logró detectar nuevas señales.
“No ha habido nuevos contactos de señales de transmisión, afirmó Angus Houston, coordinador de la misión de búsqueda internacional en rueda de prensa en la ciudad australiana de Perth para informar sobre las operaciones del día.
Explicó que después de las señales detectadas el pasado fin de semana, en las últimas 24 hora no han logrado captarse más, lo que confirmaría sin ninguna duda de que las pilas están por terminarse o ya se han agotado, según reporte de la cadena australiana ABC.
Houston dijo que si los equipos de rescate no logran captar ninguna transmisión adicional, la búsqueda continuará en una zona más grande la última señal detectada, reconoció que la misión se hará prácticamente a ciegas, pero la localización de las cajas llevará mucho más tiempo.
“Será un meticuloso trabajo y muy lento”, destacó el responsable del Centro de Coordinación de la Agencia Mixta, sin embargo destacó que la búsqueda seguirá. “Necesitamos continuar (con la búsqueda) durante los próximos días hasta que no tengamos dudas de que se han agotado las baterías, destacó.
La búsqueda se concentra en una gran superficie de aproximadamente unos 77 mil 580 kilómetros cuadrados, a más de dos mil 260 kilómetros al noroeste de Perth, hasta donde se ha desplegado un sumergible no tripulado.
Houston explicó que la transmisión de una nueva señal es imprescindible para fijar un punto donde realizar la búsqueda visual de posibles restos del avión de pasajeros de Malaysia Airlines, lo cual hasta ahora no ha sido posible.
El vuelo MH370, con 239 personas abordo, desapareció la madrugada del pasado 8 de marzo, cuando se ubicaba a unos 100 kilómetros de la localidad malaya de Kota Baru, casi una hora después de haber despegado de Kuala Lumpur, rumbo a China.
Pese a las pocas esperanzas de localizar los resto de la nave, los familiares de los pasajeros se aferran a un milagro, por lo que celebraron una vigilia en el Lido de Beijing, frente a un corazón formado con velas, en cuyo interior colocaron un avión y el código del vuelo MH370.
Los familiares se sentaron rodeando la luz de las velas colocadas en señal de luto, algunos llorando y otros sólo guardado un tributo silencioso entre lágrimas y dolor por no saber cuál fue el destino de los pasajeros del avión malayo.