El presidente interino ucraniano, Oleksandr Turchynov, señaló que las consecuencias jurídicas de ambas consultas son nulas, excepto las de tipo criminal para sus organizadores, señaló un despacho de Ukinform. Calificó ambos referendos de farsas y solo propaganda para encubrir asesinatos, secuestros, violencia y otros crímenes, dijo el también líder de la Verkhovna Rada (Parlamento).
Agregó que se encuentran amenazadas las vidas y el bienestar de los habitantes de esas regiones, y de nueva cuenta acusó a Rusia de haber inspirado ambas consultas.
Las dos consultas fueron convocadas para alcanzar la autonomía de ambas regiones respecto al gobierno central de Ucrania, y se dieron semanas después de que un referendo similar llevó a la separación de Crimea y su incorporación a Rusia.
Este lunes el Comité Central de Elecciones de Luhansk informó que de acuerdo a datos aún preliminares, entre 94 a 98 por ciento de votos fueron por la independencia de la llamada República Popular de Luhanska, con participación del 79 por ciento. En la vecina región de Donetskm el apoyo fue del 89.7 por ciento con asistencia del 70 por ciento de los electores.
Las consultas fueron organizadas por los activistas pro federalización de Ucrania y se efectuaron en medio de un operativo militar ucraniano para acabar con las protestas, señaló por su parte un despacho de la agencia rusa Novosti.
Sobre la participación, Turchinov aseguró este lunes a jefes de los grupos partidistas parlamentarios, que en Luhansk la asistencia fue del 24 por ciento de los electores y en Donetsk inferior al 32 por ciento, con poblados donde nadie votó.
En tanto, en Moscú un comunicado de prensa de la oficina del presidente ruso Vladir Putin expresó respeto por la voluntad de la población expresada en ambas consultas. Destacó también el alto nivel de participación a pesar de los intentos de frustrar la votación, agregó el comunicado citado por la agencia Itar Tass.
El comunicado del Kremlin afirma también que se saludarán todos los esfuerzos de mediación que se realicen para entablar el diálogo en Ucrania, incluidos los esfuerzos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación Europea (OSCE).