Conocido desde hace tiempo en las comunicaciones de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) como Almacén del Medio Oeste, la dependencia estadounidense en realidad mantuvo su depósito de armas secreto en Texas, reveló The New York Times.
En ese sitio se despacharon armas destinadas a las fuerzas anticastristas en Cuba durante los años de la administración Kennedy, a los combatientes anticomunistas en la guerra civil de Angola y a los opositores de los sandinistas marxistas en Nicaragua.
Según el Times, también desde ahí se enviaron pertrechos bélicos en la década de 1980 a los grupos islamistas que combatían a los soviéticos en Afganistán.
Los misiles con destino a Irán, que fueron parte del escándalo Irán-Contras en 1986, también podrían haber pasado a través del campo militar, informó el Times.
En julio de 2013, el Ejército compró dos millones de balas adecuadas para fusiles AK-47 para ser entregadas en el campo militar Stanley, agregó el periódico neoyorquino.
La CIA comenzó a prestar ayuda de armas a los rebeldes sirios que combaten el régimen del presidente Bashar al-Assad en septiembre del año pasado, de acuerdo con informes publicados por el periódico The Washington Post.
La base Stanley alberga varios almacenes que se pueden ver desde su cerco perimetral, detalló el Times.
La existencia del almacén atrajo la atención pública durante una disputa legal en 2011 interpuesta por Kevin Shipp, un exempleado de la CIA, quien argumentó que él y su familia resultaron perjudicados en su salud debido a la contaminación del medio ambiente en Stanley.
También, otro exempleado de la CIA, Allen Thomson, de forma separada llegó a la conclusión de que la instalación de Texas ha sido desde hace mucho tiempo el almacén secreto de armas de la agencia.
Thomson dijo al Times que es importante saber más sobre la historia de este almacén. “Me he preocupado acerca de la medida en la que Estados Unidos ha proporcionado armas pequeñas alrededor del mundo a varios grupos a los que ha apoyado”, explicó.
“Estas armas son muy duraderas y después de que termina la causa, ¿a dónde fueron?, cuestionó.
¿Cuántos de esos fusiles AK-47 y (lanza-cohetes) RPG-7, que actualmente vemos que son agitados en las manos de islamistas, pasan a través del almacén del Medio Oeste en su camino a estos combatientes por la libertad?, preguntó.