* Auditorio Nacional sede del tercer concierto sinfónico del grupo
México, 11 Oct (Notimex).- Con un concierto de dos horas y media de duración y acompañado de la orquesta filarmónica 5 de mayo, la agrupación de rock mexicano El Tri, creada en 1968, celebró en el Auditorio Nacional 47 años de trayectoria.
A las 18:00 horas, las pantallas del auditorio proyectaron imágenes de la amplia carrera de la banda liderada por Alex Lora, quien vestía una chamarra de cuero negra y portaba una máscara, y arrancó su presentación con un “Viva México cabrones”.
La raza más chida” fue el primer tema que sonó en la velada mientras un danzante realizaba sus movimientos por todo el estrado, a la par del sonido de la armónica e incluso un tambor con el que terminó la canción con una bandera nacional desplegada en una bocina.
Acompañados de un violín, los músicos que desde el principio pusieron al público de pie, interpretaron “Abuso de autoridad”, tema que fue coreado y alimentado con gritos de protesta.
“Yo también soy poblano, así que vamos a estrenar esta rolita”, dijo Lora para interpretar un tema que destacaba las bellezas de la ciudad de Puebla a la que definió como “La tierra de Dios”.
¿Están siendo felices?, preguntó el también compositor quien no dejó de hablar con el público ante el cual se presentó Armando Manzanero quien acompañó a Lora para cantar “Quien da un peso por mis sueños”.
“Dios los bendiga. Sigue mi hermano Alex Lora”, exclamó el cantautor yucateco antes de retirarse del escenario en medio de gritos de “Armando, Armando”, los cuales en un momento se intercambiaron por “El Tri, el Tri”.
“Hasta que el cuerpo aguante”, “esclavo del rock and roll” y “políticos ratas” fueron las canciones que se escucharon mientras que los miembros de la orquesta filarmónica tomaban sus lugares detrás de Lora quien hizo una oda a sus composiciones declarando: “mis canciones me hacen sentirme feliz”.
El tema Tu mamá no me quiere, original de la banda Vago, fue transformada en un grito de “Donald Trump no nos quiere” en la voz de Alex Lora.
“¿Están contentos? Den un aplauso entonces para recibir a la Filarmónica 5 de Mayo”, pidió el intérprete quien dejó que los instrumentos sonaran para iniciar el canto de “Virgen Morena”.
Las estrofas de “María Sabina sonaron con la armónica, la batería y los violines de la orquesta.
“Una nueva generación de rockeros nos contempla, pero que se oiga un aplauso para las verdaderas familias rockanroleras”, exclamó Lora quien interpretó “Niño sin amor”, al tiempo que la gente saltaba en sus lugares ante un cierre espectacular de la orquesta.
Luego de “Nunca es tarde”, llegó “Chavo de onda”, tema original del año 73 que puso a bailar y cantar a los presentes en el Auditorio Nacional, quienes disfrutaron, saltaron con los gritos y los aplausos del líder de la banda y sus compañeros que crearon un momento de euforia y rock.
“Vamos a cantar una rola dedicada a todas las nenas que hoy vinieron a rockanrolear”, exclamó el llamado esclavo del rock quien en medio de chistes celebrados con risas y chiflidos abrió un espacio para que la filarmónica realizara una entrada magistral para el éxito “Tú eres como un sueño”.
Lleno de sentimiento y tras un grito lleno de pasión, Alex Lora cerró los ojos por un momento, para luego continuar el show con la energía de un novato con la que repudió la violencia con la canción “Hagamos el amor y no la guerra”.
Momentos después y al puro estilo folk sonó “Oye cantinero”, tema que tras un efusivo cierre, dio paso al reconocimiento para la orquesta, cuyos miembros alzaron sus instrumentos en agradecimiento.
Ahora viene la hora feliz, exclamó el también guitarrista para interpretar “Nada me sale bien”, canción que siguió el ambiente festivo de brincos y aplausos.
Tras escuchar la historia de un hombre que le pidió a Lora que compusiera una canción a su hija asesinada por su propia madre, se escuchó el tema “Pamela” de Óscar Zárate, quien además es el director de todo el espectáculo.
Vamos a cantar una canción del nuevo disco”, explicó el autor que inició el tema con la estrofa “yo me merezco mucho más pero contigo me conformo”, en el que intervino Chela Lora, quien con un traje de cuero negro y su cabellera de un rojo intenso, bailó y cantó al lado de su esposo.
“Un aplauso para mi domadora, ella es la organizadora de todo este pinche desmadre”, dijo el cantante quien no olvidó su frase “Que viva el rock and roll”, para alentar la fiesta de casi 10 mil personas que siguieron el ritmo de El Tri.
Jorge Macias, Martin Urieta y Joan Sebastian son mis maestros y haya se fueron, dijo el autor que recibió un aplauso respetuoso. Esta tocada esta dedicada a nuestras mamás que están en el cielo y sin las que no hubiéramos podido hacer este pinche desmadre, así como a todos ustedes que tienen a alguien que se fue pero que está rockanroleando. en el cielo.
Así también para los 43 que nos faltan; no podemos más que dedicar un minuto de desmadre”, expresó el músico para dar paso a la bulla de la gente y los instrumentos, que luego tomaron el orden de “Cuando tú no estás”.
Tras casi dos horas de concierto y con el preludio de un melancólico violín se dio paso al icónico tema “Triste canción de amor”, el cual unió al público en un canto de rebeldía y amor que Alex y Celia celebraron con un beso y un baile al ritmo de las cuerdas de violín que recrearon el coro de la emblemática canción.
“En toda la historia del Tri, en estos 47 años nadie ha apoyado o patrocinado nuestra música, más que ustedes los valedores, así que a ellos les vamos a dedicar esta canción”, dijo para nuevamente recrear “ADO”.
“Gracias a toda la banda que vino, ojalá que Dios nos preste vida para volver a rockanrolear juntos, mientras tanto que Dios me los bendiga y gracias”, señaló Alex Lora para cantar “Las piedras rodantes”, con la que por un momento se despidió no sin antes agradecer al maestro Armando Cedillo, cabeza de la orquesta, así como a sus músicos.
Con una playera negra, en protesta de Donald Trump, la banda regresó al escenario para seguir la histórica velada. Gracias a toda la raza rockanrolera que esta con El Tri desde hace 47 años y los que le faltan todavía.
Gracias a toda la banda, viva México cabrones y que viva el rock and roll”, exclamó el músico quien no dejó de agradecer y cantar, mientras aventaba balones de futbol a los presentes que disfrutaron de Perro negro y callejero.
Tras dos horas y media, la fiesta culminó con el humor de Alex Lora que interactuaba de manera fresca con el público que respondía a cada provocación con risas, brincos y aplausos que no cesaron ante canciones como “Metro Balderas”.
Que dios bendiga a toda la raza, este es El Tri de México y que Viva el Rock and Roll, fue la despedida de la agrupación que abandonó el escenario en donde comprobó su humildad, talento y cariño por la música y el público.