Una tormenta de arena fuera de estación que cayó sobre Líbano y Siria cubrió Beirut y Damasco con una capa de polvo amarillo, causó problemas respiratorios a cientos de personas y causó la muerte de dos mujeres.
La reducción de la visibilidad obligó al gobierno sirio a cancelar ataques aéreos a rebeldes en una provincia central y una protesta contra la incapacidad del gobierno libanés para ocuparse de la crisis de la basura podría verse afectada.
Las escuelas en Jordania estaban cerradas, y la tormenta también llegó a Israel.
La arena llegó a Beirut después de cubrir el valle de Beká en el este del Líbano. Se aconsejó a las personas, sobre todo las que padecen problemas de salud, que permaneciera en sus casas, y muchos de los que se aventuraban a la calle llevaban mascarillas de cirujano.
El ministerio de Salud dijo que 750 personas sufrieron problemas respiratorios y dos mujeres murieron, pero no entró en detalles. Funcionarios del aeropuerto dijeron que algunos vuelos estaban demorados.