Ser un emprendedor es iniciar tu propio negocio para dejar de depender de alguien. Tiene sus ventajas, pero también sus responsabilidades.
Para tener un negocio que prospere hace falta mucho más que una buena idea, se necesita ser constante, asumir riesgos, una buena cantidad de dinero para invertir y sobre todo tener la idea clara que tomará tiempo en ver los frutos de tu negocio.
Los mejores consejos para emprendedores:
Elegir un buen local, en buen sitio, pero barato.
Lo mejor es buscar un tipo de local cuyo dueño no haya sabido sacarle provecho, fallando en el tipo de negocio que montó. Negociar el precio sin piedad.
Comenzar a emprender cuanto antes.
La edad media del emprendedor chino (excelentes emprendedores) está en los 23 años, aunque algunos lo hacen con 18. No tienen miedo y saben que lo peor que les puede ocurrir es que el negocio fracase, lo cual les dará experiencia para el próximo negocio.
No tener apego al negocio. Si no funciona, se cambia.
Si un negocio no marcha bien, no esperes a acumular pérdidas. Un buen negocio comienza a dar beneficios durante los dos primeros meses, y el negocio debe crecer mínimo un 20% durante los siguientes 6 meses. De no ser así, lo mejor es cambiar el tipo de negocio.
La competencia es sana.
Cuantos más negocios similares se abran, es señal de que acertó con el negocio y vas en el buen camino. El que muchos negocios similares existan en el mismo lugar atraerá a más clientes y toda la comunidad saldrá beneficiada.
No conformarse con un solo negocio.
Cuando le dedicas mucho tiempo a un solo negocio, aún siendo buena señal, ya sabes que tienes un negocio rentable, y es el momento justo para abrir uno o dos negocios más. De esta forma ya no puedes estar todo el día dedicado a un solo negocio, y automáticamente te convertirás en un empresario.
Para trabajar, mejor colaboración empresarial
Cada trabajador que comienza junto a un emprendedor, con el tiempo, el mismo emprendedor financiará el proyecto de sus empleados.
Nunca se sentirá explotado, digamos que ayuda al empresario a crecer y a levantar el negocio. Cuando el negocio marcha bien y estos trabajadores ya tienen experiencia, se lanzan al emprendimiento y contratan nuevos trabajadores por un escaso sueldo. Estos trabajadores, en unos 5-6 años iniciarán su propio negocio.
No pedir jamás un préstamo al banco. La familia y amigos no te cobran intereses.
Lo mejor es trabajar y ahorrar. Durante años no tener ningún tipo de gasto en ocio, para poder acumular la suma necesaria para abrir tu propio negocio. De necesitar algo más, pedir el dinero a tus familiares, amigos o a tu propia “competencia” y recibir la financiación sin problema, pero pedir dinero al banco, jamás.
Cuando un sector está saturado, busca otro. Detectar oportunidades de negocio.
Buscar siempre la rentabilidad de los negocios te ayudará a detectar oportunidades para abrir uno nuevo o darle un giro a lo ya existente.
Dale a tu cliente lo que necesita, aunque no lo entiendas.
Con un solo cliente que te pregunte por un producto que no tengas, busca de inmediato el proveedor que te sirva este producto. Escucha al cliente siempre e intenta abastecerlo de todo tipo de productos, algunos más demandados y otros menos, pero si hay algo que se pueda vender y un solo comprador, ¿por qué perder una venta?.
Trabajo y ahorro aunque vivas en malas condiciones durante unos años.
Hay que estar dispuestos a asumir sacrificios, buscar un aquiler barato y no tener deudas bancarias, que son nuestro peor enemigo. Una vez que alcances tus metas financieras es momento de permitirte todos los lujos por los que un día luchaste.