Residentes de la ciudad china de Tianjin, cuyas casas quedaron dañadas por las enormes explosiones que han dejado al menos 114 muertos y 70 desaparecidos, exigieron al gobierno una indemnización.
Nosotros, las víctimas, exigimos al gobierno una compensación por nuestras casas dañadas. No sabemos si habrán nuevas fugas en el futuro. Podríamos estar viviendo cerca de una bomba de tiempo, indicó un residente.
Los manifestantes trataron de mostrarse respetuosos con las autoridades, pero dejaron claro que el agua, el aire y las aguas subterráneas están contaminados. No podemos vivir aquí, dijo uno de los inconformes.
Unas 150 personas, algunas de ellas con cicatrices en la cara y muchas con mascarillas respiratorias, denunciaron que los depósitos de almacenamiento químico fueron construidos de manera ilegal cerca de sus casa, según un diario local.