Theresa May ha anunciado este jueves la apertura de una investigación oficial sobre el trágico accidente que sucedió en la torre Grenfell de Londres, al mismo tiempo el alcalde de esa ciudad, Sadiq Khan ha reclamado a la primera ministra británica que además de que esta investigación sea “independiente” y que los resultados de la misma salgan a la luz a más tardar en el verano próximo.
El último balance de víctimas fue estimado en 17 personas que ya no podrán ver la luz del sol, aunque es temido que esta cifra se siga elevando con el paso de los días.
El alcalde ya ha justificado su demanda de investigación independiente, además de una pronta publicación de los resultados de la misma, todo esto ante “la inquietud sobre las medidas de seguridad vigentes en otros edificios de la ciudad que han sido objeto de reformas similares” a las de la torre del incendio en el barrio de Notting Hill (North Kensigton), ubicándose al oeste de Londres.
“Las tremendas dimensiones de la tragedia exigen respuestas inmediatas a las cuestiones urgentes que se nos ha planteado” fue lo manifestado por Khan a raíz del anuncio de que las operaciones de los servicios de emergencias han pasado desde la fase de búsqueda y rescate hacia la de “recuperación”.
Lo cual solo puede significar que, después de haber rescatado a 65 hombres y niños por parte del departamento de bomberos, la posibilidad de seguir encontrando personas con vida se va desvaneciendo con el tiempo.
En un inmueble de 120 viviendas con 24 pisos, es casi imposible para las autoridades el aventurarse a dar un número exacto de personas estimadas a que hayan perdido la vida, o que se encuentren aún sin ser encontradas.
Todas las expectativas de encontrar sobrevivientes se encuentran en etapa crítica, aunque como se mencionaba anteriormente, resulta casi imposible conocer el número exacto de personas que falten por ser encontradas.