Las apelaciones argumentaron que Basso sufre un estado mental delirante, no comprende que será ejecutada y mucho menos que se le aplicará la pena de muerte.
Basso, quien se encuentra paralizada a partir de la cintura, sería la décimo cuarta mujer ejecutada en Estados Unidos desde 1979.
Las Cortes de Apelaciones Criminales de Texas y la Federal para el Distrito Suroeste de Texas rechazaron hoy recursos de los abogados defensores para invalidar el dictamen de una juez estatal, emitido en enero último, que declaró a Basso competente para la ejecución.
La mujer fue sentenciada a la pena de muerte por la tortura y asesinato en agosto de 1998 de Luis “Buddy” Musso, de 59 años, a quien atrajo a Texas con una promesa de matrimonio.
Las autoridades argumentaron en el juicio que la víctima tenía la inteligencia de un niño de siete años.
Basso y sus cinco cómplices, que cumplen penas de prisión, mataron a Musso con el fin de reclamar los beneficios del seguro de vida, dijeron los fiscales.
La Junta de Perdones y Libertades Condicionales de Texas deberá resolver en las próximas horas si recomienda al gobernador del estado, Rick Perry, clemencia para Basso con la conmutación de su sentencia a otra de cadena perpetua.