El Departamento de Energía (DOE) de Estados Unidos informó en un comunicado que el primer cargamento de residuos transuránicos fue enviado la víspera al Basurero de Baja Radiactividad de Texas, ubicado en el condado de Andrews en el oeste de la entidad, en la frontera con Nuevo México.
El DOE precisó que se prevé el envío de hasta 10 camiones con desperdicios por semana, durante los próximos meses.
El basurero radiactivo, operado por la compañía privada Waste Control Specialists, recibirá un pago de 8.8 millones de dólares para almacenar los residuos durante al menos un año.
Los residuos deberían haber sido enviados originalmente a la Planta Piloto de Aislamiento de Desechos (WIPP), ubicada cerca de Carlsbad, en el sur de Nuevo México.
El WIPP es el único depósito en Estados Unidos para residuos transuránicos, comúnmente conocida como residuos TRU, que es material radiactivo generado por el programa de armas nucleares durante la época de la Guerra Fría.
El sitio, que comenzó a operar en 1999, permanece cerrado en tanto se investiga y soluciona una fuga de radiación registrada el pasado 14 de febrero.
El traslado de desechos radiactivos transuránicos a un depósito de desperdicios nucleares de baja intensidad ha preocupado a algunas autoridades de Texas y a grupos ambientalistas.
El representante estatal demócrata Lon Burnam, advirtió que podría acudir a una Corte judicial para obtener una orden temporal que detenga el envío de los desperdicios nucleares al basurero en el Condado de Andrews.