35 personas muertas y 54 heridos es el saldo que dejó el asalto a un complejo hotelero al sur de Manila, Filipinas, según informaron las agencias de noticias internacionales.
La mayoría de las víctimas fallecieron asfixiadas por el humo que ha provocado el asaltante al incendiar las mesas del casino del complejo Resorts World Manila, que también cuenta con un cine y una galería comercial. Posteriormente, el atacante se prendió fuego y murió antes de ser capturado.
El propio resort difundió en redes sociales un comunicado que dice:
Es con profunda tristeza que además de los 54 heridos, hay 35 víctimas reportadas de este trágico incidente. No podemos divulgar información sobre las identidades de las víctimas en este momento, ya que estamos esperando la confirmación final de SOCO (Agentes de investigación criminal). Estaremos informando a sus familiares tan pronto como la información sea con firmemente confirmada y divulgada por SOCO.
De nuevo. Apelamos por su comprensión y consideración. La compañía está de luto con las familias. Estamos comprometidos a extender el apoyo y asistencia completa a los heridos y a las familias de los fallecidos. Este inesperado ataque violento contra vidas inocentes no romperá el espíritu en el que Resorts World Manila fue construido. Pedimos sus oraciones durante estas horas oscuras.
Se ha instalado un puesto de asistencia en la planta baja del edificio NECC. Puede comunicarse con nosotros en los siguientes números telefónicos: 0917-872-8300 y 0917-872-8756.
La policía informó de que la mayoría de las víctimas se encontraban entre la segunda y la octava planta del complejo. Aunque horas antes el jefe de la policía aseguró que no había heridos ni toma de rehenes.
Las fuerzas de seguridad han indicado que no hay confirmación de que se trate de un ataque terrorista, pese a que el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) asumió en un primer momento la autoría de los hechos.
Inicialmente se informó de que varios hombres habían abierto fuego en el complejo hotelero de forma indiscriminada y varios empleados relataron a medios locales que varias personas habían sido alcanzadas por las balas pero posteriormente el jefe de la policía lo desmintió. “Nadie ha recibido un tiro”.
El atacante, que aparentemente actuaba solo, entró en las salas de juego del complejo hotelero y disparó con un rifle M4 a una pantalla de televisión. Después vertió gasolina sobre una mesa de juego y le prendió fuego. El jefe de policía asegura que el hombre abandonó la sala y subió las escaleras hacia el hotel del resort.
La policía filipina, que rodeó el complejo turístico, comenzó a evacuar el establecimiento poco después de conocerse el incidente. En el resort se registraron escenas de pánico.
“Los clientes gritaban. Fuimos al guardarropa del sótano y nos escondimos allí. La gente gritaba y los huéspedes y los empleados entraron en pánico”, ha afirmó Maricel Navarro, empleada del complejo.
Bomberos y ambulancias se desplazaron hasta el hotel, desde donde se elevaba una fuerte humareda.
En la ciudad de Marawi, en el sur del país, milicias islamistas afines al ISIS combaten desde hace 10 días contra tropas gubernamentales en enfrentamientos que han causado más de 170 muertos.