Algunos agricultores tienen motivos adicionales para regocijarse en la Navidad: es la temporada para ofrecer en alquiler animales para las escenas animadas del pesebre y otras celebraciones.
Una de las tradiciones navideñas favoritas de Larry Squire, que se crio en un sector rural en Burlington, Wisconsin, era ayudar a montar una escena navideña en el granero de su tío. “Tomábamos prestados los animales de toda la vecindad”, recordó.
Por eso, hace varios años Squire trajo la tradición a la Iglesia Metodista Unida de Cargill en su ciudad actual de Janesville, en Wisconsin, donde renta animales de zoológicos y granjas. La iglesia renta animales para colocar en el pesebre junto con voluntarios ataviados como María, José, los ángeles y los reyes magos.
“Es algo hermoso. La presencia de los animales brinda tranquilidad y paz”, comentó.
Los animales de granjas, los renos y los camellos están en gran demanda entre el Día de Acción de Gracias y Navidad, afirmó Megan Powell, coordinadora de eventos en Honey Hill Farms, un zoológico itinerante con sedes en Berry, Kentucky y Utica (Ohio).
“Haremos de 25 a 30 eventos en un fin de semana”, afirmó Powell. “Con frecuencia tenemos lleno de público”.
Rentar animales para programas navideños contribuye a financiar su alimentación y cuidado, dijo, y ha sido un rubro de gran crecimiento para el negocio. “A las iglesias les encanta”, observó. “Nosotros no hemos creado la demanda. Sencillamente nos hemos visto sobrepasados por ella”.
Honey Hill trabaja con docenas de iglesias, escuelas y comercios a los que suministra ovejas, asnos y cabras para escenas del pesebre, dijo Powell, cuya madre comenzó el negocio hace unos 15 años. El costo del alquiler empieza en 325 dólares la hora para un grupo de animales. Por lo general, se permite que los visitantes los acaricien.
“Y tenemos un camello”, agregó. “Pero uno solo, y por eso se alquila rápido”.
Powell señaló que los clientes también quieren renos y que ha pensado al respecto aunque no los cría. “La demanda de renos es realmente elevada”, afirmó.
En su granja en Knoxville, Tennessee, Kyle Wilson renta renos. El precio comienza en 1.500 dólares para un par de renos por cuatro horas.
“Tengo 21 renos pero no es suficiente”, afirmó. “Empecé hace 15 años y cada año he tenido un año récord”.