Autoridades locales anunciaron el levantamiento de las evacuaciones obligatorias en todos los incendios que se iniciaron a media semana, que destruyeron más de 15 mil hectáreas y fueron combatidos por más de cinco mil bomberos.
En San Marcos, más de 600 bomberos continuaban en la lucha contra los siniestros que fueron contenidos aquí en 89 por ciento y destruyeron cerca de mil hectáreas.
En el incendio llamado Cocos las llamas destruyeron más de tres docenas de estructuras y fue combatido con 55 camiones, dos helicópteros y seis bulldozers.
El costo del combate en este incendio en donde no hubo heridos, superó los cinco millones 700 mil dólares y las perdidas más de 20 millones de dólares reportaron voceros de Cal Fire.
El incendio Poinsettia en el área de Carlsbad fue controlado en 100 por ciento mientras en los incendios en San Mateo y Las Pulgas están ahora en 75 y 97 por ciento contenidos.
El incendio Tomahawk también fue contenido en su totalidad y en donde todos los militares y empleados civiles en Camp Pendleton se les permitió el regreso a sus actividades habituales.
La mayoría de los 10 incendios que se desataron a mediados de la semana pasada se desconocían las causas y las autoridades continúan investigando.
Indicaron que el incendio Bernardo fue causado por chispas emitidas en una área de construcción.
El gobernador Brown hizo un llamado de alerta a la población a extremar medidas a fin de evitar incendios por las altas temperaturas y la sequía que afecta a la región.