En una comparecencia ante la Cámara de diputados, , el ministro del Interior, Angelino Alfano, dijo que tocará al prefecto (responsable de la seguridad) napolitano, Francesco Musolino, establecer este miércoles la suspensión de Luigi De Magistris por un periodo de hasta 18 meses. Ello en cumplimiento de la llamada ley Severino, que impone el congelamiento de políticos condenados judicialmente.
Alfano precisó que debido a que la sentencia contra el alcalde de Nápoles, dictada el pasado 25 de septiembre, no es aún definitiva será solamente suspendido y no obligado a renunciar. El prefecto de Nápoles ha recibido la comunicación de la sentencia y procederá hoy a cumplir las normativas de ley para la suspensión del alcalde, indicó el ministro.
De Magistris, sin embargo, ha declarado reiteradamente que no dejará el cargo que ocupa desde que fue electo con una amplia mayoría en 2011, cuando se presentó como candidato del partido Italia de los Valores.
El aún alcalde fue sentenciado a 15 meses de reclusión por abuso de funciones, porque en 2007, cuando era magistrado de la ciudad de Catanzaro (sur), usó un archivo de miles de llamadas telefónicas de ministros, generales, parlamentarios y políticos .
El problema era que para tener acceso a esa información confidencial necesitaba la autorización del Parlamento, con la que no contaba. En el proceso respectivo varios parlamentarios, como el ex primer ministro, Romano Prodi o el ex alcalde de Roma, Francesco Rutelli, se constituyeron en parte acusadora. Se espera que tras la suspensión de De Magistris su puesto sea ocupado interinamente por el hasta hoy vicealcalde de Nápoles, Tommaso Sodano.