“Hago un llamado a todas las partes, especialmente a los signatarios de la Declaración de Ginebra, para que creen las condiciones que permitan una activa implementación de las medidas que establece’’ dijo Didier Burkhalter en nombre de la presidencia suiza de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
En un discurso sobre terrorismo pronunciado en Interlaken, urgió a Rusia, Estados Unidos, Unión Europea y Ucrania a implementar el acuerdo logrado pasado 17 de abril. Sostuvo que a la crisis en Ucrania contribuyen las distintas percepciones que tienen los países de las amenazas externas e instó a resolver esas divergencias para restablecer la estabilidad y la seguridad en Europa.
Por otra parte, la OSCE condenó categóricamente el secuestro de un grupo de observadores militares europeos perpetrado por milicias separatistas pro-rusas en el sureste de Ucrania el pasado viernes y exigió su libertad inmediata e incondicional.
Sin embargo, los observadores, luego de ser vistos en rueda de prensa y de rechazar acusaciones sobre espionaje, siguen privados de su libertad a excepción de uno de ellos, el sueco Thomas Johansson, liberado por su frágil estado de salud.
El grupo de observadores viajó a Ucrania a invitación del Gobierno de Kiev y, como suele hacerse en estos casos, todos los miembros de la OSCE, formada por 57 países entre ellos la Unión Europea, Rusia y Estados Unidos, fueron informados de la misión.