En el juego de ida de la semana pasada, Atlético Paranaense ganó 1-0 en la ciudad de Curitiba.
Los paraguayos enfrentarán en la siguiente etapa al ganador del duelo entre Chapecoense y River Plate.
El lateral Nikao del conjunto visitante fue expulsado por el árbitro Christian Ferreyra de Uruguay a los 86 minutos por agresión contra el delantero Guido Divanni.
A los tres minutos, Luqueño se puso en ventaja con la acción individual de Ortega, quien anotó enviando la pelota por encima del portero Weverton.
El defensa central José Leguizamón convirtió el segundo a los 36 minutos aprovechando el rebote de un tiro penal que él mismo ejecutó y que Weverton interceptó, aunque sin capturar el balón.
La falta del penal fue cometido por Roberto al derribar a David Mendieta que penetraba peligrosamente al área.
Mendieta jugó hasta los 56, cuando fue reemplazado por Luis Matto, pero mientras estuvo en el terreno fue el mejor jugador local por su velocidad, habilidad y buen manejo del balón.
“Hice un gran esfuerzo físico para anular la ventaja inicial de Paranaense”, declaró Mendieta. Pedí el cambio porque estuve muy cansado pero mis compañeros supieron mantener la línea para pasar a semifinales”.
Atlético Paranaense exageró con los pases laterales buscando que la defensa rival cometiera un error o dejara abierto un espacio para intentar llegar al gol.
Sólo en los minutos finales, cuando ya se desvanecían sus esperanzas de gol, planteó un ataque frontal, pero Luqueño no tuvo fisuras defensivas.