El juez Orlando Peña impuso la sentencia luego de una audiencia realizada la víspera en la Corte Federal del Distrito Oeste de Texas, en San Antonio, en la que el mexicano se declaró culpable de lavado de dinero.
La sentencia incluye además de los 30 meses de prisión, el decomiso de cerca de cinco millones de dólares en cuentas de inversiones, cinco casas propiedad de Peña Arguelles o de sus familiares y un automóvil, y tres años bajo libertad condicional.
Peña Arguelles, quien posee la residencia legal en Estados Unidos, fue arrestado el 8 de febrero de 2012 en San Antonio, días después de que un gran jurado determinó que existían evidencias suficientes para procesarlo por un cargo de lavado de dinero.
Las autoridades acusaron al empresario de 58 años de edad de fungir como intermediario para traspasar dinero del Cartel de Los Zetas para otorgárselo a exfuncionarios públicos de Tamaulipas, como pago por protección.
En la acusación se menciona que uno de los exfuncionarios que habría recibido este tipo de sobornos, habría sido el exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, quien es buscado por la justicia estadounidense.
De acuerdo con la acusación, cuando fue detenido, el empresario se escondía de Los Zetas en una casa de San Antonio, luego que la banda criminal mató en noviembre de 2011 a su hermano Alfonso en Nuevo Laredo y dejó su cuerpo en una plaza con un mensaje para él.
El mensaje, escrito en una manta, acusaba a Peña Arguelles y a su hermano Alfonso de haber robado cinco millones de dólares de Los Zetas.