La sentencia fue la primera en un caso que involucró al alcalde de la ciudad y varios administradores, encontrados culpables de soborno, corrupción y enriquecimiento ilícito durante el ejercicio de sus cargos.
Spaccia fue sentenciada en una corte de Los Angeles a 11 años y ocho meses de prisión por el manejo inadecuado de recursos públicos.
La exfuncionaria, cuyo sueldo ascendía a 564 mil dólares al año, entró en prisión en diciembre pasado cuando se le presentaron 11 cargos de corrupción.
La exfuncionaria fungía como asistente del administrador de la ciudad, contaba con 26 semanas de vacaciones al año y percibía alzas salariales de 50 por ciento cada año.
La exempleada fue una de ocho funcionarios de la ciudad, entre ellos el administrador Roberto Rizzo, arrestados en un operativo.
Rizzo, quien está pendiente de conocer su sentencia, percibía un sueldo de un millón 180 mil dólares, que el mismo se otorgaba en una cifra varias veces mayor al sueldo del presidente de Estados Unidos.