La confirmación de su determinación hecha este lunes en su última cuenta pública, en el presidencial Palacio de La Moneda, subraya además su intención de repostularse para la presidencia, en las elecciones de 2017, agregó el analista.
“El trabaja y está generando una posibilidad cierta de ser el candidato en 2017. Y eso ya no es una percepción y ha dejado establecido como algo concreto que el legado de su gobierno sería la base programática de lo que aspira en el futuro”, afirmó el politólogo Guillermo Holzmann.
La estrategia del presidente saliente es terminar “apareciendo como el interlocutor de la oposición respecto a Bachelet”.
Incluso, dijo Holzmann, “más allá de lo que hagan los grupos de la derecha, la reorganización del bloque pasa por la figura de Piñera”.
“Tendremos a la Unión Demócrata Independiente, por una parte, Renovación Nacional por otra, y también a Piñera y el grupo de ex ministros, políticos, líderes y adherentes, que probablemente van a dar forma a un nuevo partido referencial de la Alianza”, dijo.
Los hechos constatan, concluyó el analista, que Piñera “trabaja y está generando una posibilidad cierta de ser candidato en 2017”.
Y mientras tanto, se transformará en la práctica en el “presidente en la sombra” a la cabeza de una “nueva derecha”, alejada de los fundamentalismos de la Derecha tradicional y blanqueada de su pasado pinochetista, y con “sensibilidad social”, apuntó.