El nuevo líder de la cámara de mayoría republicana dijo el domingo en varias entrevistas que no trabajará con Obama debido a que el presidente se saltó al Congreso al decretar una orden ejecutiva para proteger de la deportación a millones de personas que viven en Estados Unidos sin autorización legal.
“No creo que podamos confiar en el presidente en este tema”, dijo Ryan al programa “Meet the Press” de NBC y otras transmisiones. “No creo que debamos avanzar en una legislación integral de migración con un presidente que ha demostrado que no es de fiar en ese asunto”.
La decisión pospone por lo menos hasta 2017 cualquier posibilidad de una reforma migratoria integral, mucho después de que Obama deje el puesto. Eso deja la legislatura estancada en la cámara baja y sin posibilidad de ser revivida por el Senado.
Para Ryan, la medida elimina las posibilidades de un enfrentamiento con los mismos conservadores de la Cámara de Representantes que le dificultaron el accionar a su predecesor John Boehner y lo orillaron al retiro. Ryan propuso estancar la propuesta integral de migración, y a los conservadores les preocupaba que una vez que fuera nombrado presidente de la cámara intentara revivirla.
Ryan admitió en “Fox News Sunday” que le preocupa el enfoque de los republicanos en las tácticas y no en lo que definió como “visión”.
“No tenemos”, dijo Ryan. “Debemos tener una visión y ofrecerle una alternativa al país, para que vean cómo será el panorama si tenemos la oportunidad de liderar, si llegamos a la presidencia y mantenemos el Congreso. Así es como arreglaremos los problemas que enfrentan las familias trabajadoras”.
Enfrentarse con Obama en un tema tan complejo y volátil como una reforma migratoria integral, dejó entrever Ryan, no es algo útil en estos momentos para el partido republicano.
Señaló que es posible lograr la aprobación de una política menos relacionada con la inmigración.
“Si creemos y alcanzamos un consenso en cosas como reforzamiento en la frontera y seguridad interna, estamos bien”, dijo a “This Week” de ABC.
Hace un año, Obama emitió directrices que evitaban temporalmente la deportación de unos cuatro millones de inmigrantes que estaban en el país sin autorización legal, junto con permisos para laborar en Estados Unidos”.