En los últimos años, Rusia sólo ha enviado a astronautas y cosmonautas profesionales al espacio pero ello cambiará en 2018 ya que retomarán su programa de turismo espacial, dijeron autoridades rusas.
Entre 2001 y 2009, cuando paralizó la iniciativa, Rusia envió a siete viajeros de pago a la Estación Espacial Internacional. Los viajes turísticos son del todo imposibles desde 2011, cuando Estados Unidos cerró su programa de transbordadores dejando a las naves Soyuz rusas como únicos medios de transporte con el espacio.
Rusia, sin embargo, hizo una excepción con la soprano británica Sarah Brightman cuyo vuelo está previsto que despegue el 1 de septiembre.
RKK Energia, el fabricante estatal de naves espaciales, dijo en su informe trimestral publicado el martes que planea compensar la caída prevista en la demanda de vuelos tripulados retomando el programa de turismo espacial en 2018.