Moscú, 27 Nov (Notimex).- Rusia anunció hoy su decisión de suspender el régimen de exención de visado con Turquía a partir del primer día de enero de 2016, argumentando razones de seguridad de los ciudadanos rusos.
El movimiento llega en momentos en que las tensiones con Ankara han escalado luego del derribo de un avión de combate ruso esta semana cerca de la frontera entre Turquía y Siria, que presuntamente violó el espacio aéreo turco.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, dio a conocer este viernes la suspensión de régimen de exención de visado después de reunirse con su homólogo sirio Walid Muallem en Moscú, de acuerdo con despachos de la agencia informativa TASS.
Lavrov reiteró que Rusia está preocupada por un aumento de las amenazas terroristas procedentes de Turquía, así que esta medida está directamente vinculada con la seguridad de Rusia y de nuestros ciudadanos, sostuvo.
Hay tráfico dirigido de hombres armados a través de Turquía en varias direcciones, refirió y agregó que Ankara se ha mostrado renuente a la cooperación con Rusia sobre ese asunto. Esto no son amenazas inverosímiles, se trata de amenazas muy reales, agregó.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, había advertido previamente a los ciudadanos que eviten viajar a Turquía, cuyas playas accesibles son muy populares entre los turistas rusos, y la cancillería instó a aquellos que se encuentran allá a volver a casa.
Moscú ya ha tomado medidas contra Ankara por el derribo de un avión de guerra ruso por cazas turcos el pasado martes y, aunque ha descartado cualquier respuesta militar hacia Turquía, ha anunciado medidas que impactan a su economía, incluidos turismo, inversiones y agricultura.
Sin embargo, Lavrov aclaró que la decisión de suspender el régimen de exención de visado fuese un acto de venganza. Las amenazas desde ese país son reales, insistió el canciller ruso.
Indicó que Turquía este año ha deportado a más de 200 nacionales rusos, a menudo (enviándolos) a terceros países incluyendo a aquellos que conducen políticas que son hostiles hacia Rusia.
Las relaciones bilaterales se deterioraron tras el derribo del avión ruso que cumplía una misión en Siria, en el marco de la campaña de ataques aéreos que Moscú realiza desde el pasado 30 de septiembre contra objetivos del extremista Estado Islámico (EI) en ese país.