Un día comlicado para Otto Pérez Molina, presidente de Guatemala. Este martes un juez ordenó el arraigo del mandatario para impedir que salga del país luego de que el Congreso le retiró la inmunidad para ser procesado en el caso de corrupción de “La Línea”.
El Congreso de Guatemala retiró la inmunidad a Otto Pérez Molina, y abrió la posibilidad de que sea procesado penalmente por sus presuntos vínculos con un masivo fraude fiscal que ha sumido al país en una crisis política sin precedente en la historia reciente.
El vocero presidencial, Jorge Ortega, aseguró que el mandatario respeta el fallo y que enfrentará la justicia. “El presidente está consciente del nuevo escenario, que no era el más deseado pero era muy probable”.
Con una votación unánime de 132 legisladores presentes, el pleno del Congreso tomó la histórica decisión de quitar la inmunidad a Otto Pérez Molina, quien ha rechazado haber sido parte del fraude, en un caso que ya llevó a la cárcel a su vicepresidenta Roxana Baldetti.
El retiro de la inmunidad no remueve a Pérez Molina de la presidencia, y sólo permite que se le procese como a cualquier otro ciudadano y que un juez eventualmente pueda solicitar su detención.
“El partido nos dio línea para votar y retirarle la inmunidad al presidente. El que nada debe, nada teme”, dijo a el diputado oficialista Luis Fernández Chenal a la agencia AP.
En las afueras del Congreso, cientos de personas celebraron la decisión y se escucharon fuegos pirotécnicos.
El escándalo que ha salpicado a Pérez Molina se desató cuando se identificó una red denominada “La Línea”, por la que funcionarios y particulares presuntamente habrían recibido sobornos de empresarios para que les ayudaran a evadir impuestos en sus importaciones.
La Fiscalía y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala habían solicitado el retiro de la inmunidad al presidente tras determinar que estaría involucrado en el caso. La ex vicepresidenta Baldetti renunció al cargo el 8 de mayo y la semana pasada fue enviada a prisión preventiva.