Un 53 por ciento de estadounidenses desaprueban el Obamacare que entró en vigor en 2010, mientras que un 41 por ciento la consideran positiva, según la encuesta del Centro de Investigación Pew. Sin embargo, el sondeo encontró que aún aquellos críticos de la nueva ley de cobertura médica prefieren que los funcionarios electos corrijan sus fallas, más que eliminarla por completo.
El centro Pew sostuvo que en Estados Unidos subsisten diferencias partidistas en relación con la Ley de Salud Asequible, toda vez que 72 por ciento de los demócratas aprueban la legislación, comparado con 37 por ciento de los independientes sólo 8.0 por ciento de los republicanos. Sólo los miembros del ultraderechista Partido del Té favorecen de madera abrumadora que los legisladores revoquen la ley.
El sondeo mostró que la comunidad hispana se encuentra dividida a la mitad sobre los beneficios de la ley, a pesar que la Casa Blanca mantiene que 10.2 millones de latinos podrían beneficiarse de sus posiciones de cobertura médica. Un 47 por ciento de los hispanos aprueba la ley, mientras que un porcentaje idéntico la rechaza.
El Centro Pew hizo notar el apoyo de los hispanos a la ley de salud asequible había ascendido a 61 por ciento en 2013, sin embargo empezó a caer de manera aguda a partir de octubre del año pasado y no se ha recuperado. El sondeo se produce en momentos en que la administración de Barack Obama mantiene una intensa campaña para lograr el mayor número posible de personas inscritas a la ley, antes del plazo del 31 de marzo.
Bajo los términos de la legislación, aquellas personas que no tengan seguro médico después de esa fecha serán multadas individualmente. La encuesta fue realizada del 27 de febrero al 16 de marzo entre tres mil 335 adultos, con un margen de error de al menos dos puntos porcentuales.