El Partido Popular (PP), que ostenta el gobierno español, perdió la mayoría absoluta frente a los partidos de nueva creación en las elecciones locales que se llevaron acabo este domingo.
Los comicios en ocho mil 122 municipios, y en 13 de las 17 comunidades autónomas (excepto Cataluña, País Vasco, Galicia y Andalucía), dejaron resultados como el triunfo de la activista Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona, en el noreste del país.
La candidatura de Guanyem Barcelona, Iniciativa Cataluña Verdes, Podemos Barcelona, Proceso Constituyente y Equo que encabeza Colau obtuvo 11 concejales frente a 10 de Convergencia i Unió (CiU) actualmente en el poder de esa ciudad.
En Madrid, el PP quedó sin mayoría absoluta -de 29 concejales- al obtener 21, frente a 20 de Ganemos Madrid, que agrupó a Podemos, Equo y otros movimientos sociales se presentaron en este municipio.
El ascenso de esa candidatura que encabeza Manuela Carmena, y de la nueva formación Ciudadanos que obtuvo siete concejales, dejó a la histórica Izquierda Unida (IU) y Unión Progreso y Democracia (UPyD) sin representación en la capital española.
En la Comunidad de Madrid, cuya mayoría absoluta es de 67 escaños, el PP obtuvo 47; el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) 39; Podemos 27 y Ciudadanos 17 diputados, lo que obliga a alianzas o pactos para que alguno de los partidos forme gobierno.
En la Comunidad Valenciana, cuya mayoría absoluta es de 50 escaños el PP obtuvo 30; el PSOE 23; la izquierdista Compromís 20; Ciudadanos y Podemos 13 diputaciones locales cada uno, por lo que también deberán negociar sobre la formación de gobierno.
El conteo de votos este domingo daba al PSOE el triunfo sin mayoría absoluta con 30 escaños sobre 28 del PP, seis a Podemos y una a Ciudadanos, por lo que se confirmarse ese resultado también deberán negociar para formarse el gobierno local.
En Aragón, cuya mayoría para gobernar es de 34 escaños, el PP ganaba las elecciones en el conteo oficial antes de llegar al 100 por ciento, con 21 diputados, sobre 18 del PSOE; y 14 de Podemos.
En Cantabria el PP perdió la mayoría absoluta (de 18 escaños) al obtener 13 diputados, sobre 12 del Partido Regionalistas de Cantabria, cinco del PSOE, tres de Podemos y dos de Ciudadanos.
En las Islas Baleares, que necesita de 30 escaños para gobernarse, el PP obtuvo 20 diputados; el PSOE 13, Podemos 10 y el resto entre fuerzas regionales.
En Castilla La Mancha (de 17 escaños para mayoría para gobernar) el PP estaba al borde de perder la mayoría absoluta con un 80 por ciento de conteo de votos, al tener 16 diputados, frente a 14 del PSOE y 3 de Podemos.
En Castilla y León el PP obtuvo 42 diputados (43 es la mayoría absoluta); el PSOE 25, Podemos 10, Ciudadanos cinco y el resto entre otras formaciones.
En La Rioja el PP se quedó a dos escaños de la mayoría absoluta al tener 15 escaños, sobre 10 del PSOE y cuatro por igual a Podemos y Ciudadanos.
En Asturias el PSOE ganaba sin mayoría absoluta, mientras en Murcia y Navarra (bajo las siglas de Unión del Pueblo Navarro) el PP rozaba la mayoría para gobernar.
De las negociaciones que se realicen para la formación de gobiernos en donde no hay mayorías dependerá la conformación del nuevo mapa político del país.
De acuerdo a lo que anunciaron los candidatos durante la campaña electoral, las alianzas para apoyar al PP formar gobierno sería con Ciudadanos, mientras que otras opciones son las de Podemos y PSOE para desbloquear la falta de mayorías en algunos territorios.