Residentes de California piden detener militarización de la zona fronteriza

Varias organizaciones se manifestaron esta semana ante las oficinas congresistas federales en California, a quienes en diálogos por internet, demandaron detener un la militarización de la zona fronteriza.

 

Por lo menos una docena de grupos se manifestaron en las oficinas de tres de los cinco congresistas en San Diego para exigir que se detengan planes de desplegar 20 mil agentes adicionales de la patrulla fronteriza y una flota de aviones no tripulados en una franja de 150 kilómetros de la frontera.

“Significa que cuando el flujo migratorio alcanza su nivel más bajo en medio siglo, vamos a tener a miles de agentes recorriendo nuestras comunidades fronterizas y aviones de espionaje aéreo sobre nuestras comunidades”, dijo a Notimex el director del Consorcio de los Derechos de los Inmigrantes de San Diego, Pedro Ríos.

Las comunidades formaron en las tres protestas ante oficinas de congresistas delegaciones que dialogaron con los legisladores Darrell Issa, Duncan Hunter y Juan Vargas. Las protestas y encuentros cibernéticos con los congresistas se llevaron a cabo en las ciudades de Vista, El Cajón y Chula Vista.

Adriana Jasso, la directora regional entrante del Comité de Servicios Amigos de las Américas, presentó un desplegado con las demandas de representantes de todas las comunidades de 18 ciudades del condado de San Diego.

“Lo que les exigimos a los congresistas es sentido común y respeto a las necesidades de los electores que los eligieron y sus familias”, dijo Jasso. Cuestionó el “gasto excesivo e innecesario” de contratar a miles de oficiales fronterizos, cuando el promedio de detención actual para cada patrullero es de una detención casi cada 20 días, y los aviones no tripulados, o drones, cuestan en promedio 18 millones de dólares cada uno.

Son recursos, dijo, que se necesitan en la frontera para la educación pública y para agilizar el cruce de decenas de miles de visitantes diariamente desde México, quienes esperan horas para pasar a San Diego y el sur de California a hacer compras.

Los manifestantes colocaron ante la oficina del congresista Juan Vargas, el único latino en la región, una réplica de un avión no tripulado y le reprocharon que como legislador representante de toda la frontera de California y de la comunidad latina asuma una posición débil ante imposiciones republicanas de militarizar la frontera.

 

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