Washington, 29 Oct (Notimex).- Luego del debate presidencial republicano las críticas a la cadena CNBC, por su manejo y control de la presentación, escalaron a un intercambio ríspido entre el Comité Nacional Republicano (RNC) y la televisora.
Reince Priebus, presidente del RNC, fustigó a la televisora al término del debate indicando en las redes sociales que la CNBC debería avergonzarse por la forma en que manejó el debate y por hacer preguntas capciosas.
Más tarde, luego que varios representantes de las campañas presentaran quejas ante el RNC sobre el tono y la substancia del tercer debate para los aspirantes presidenciales republicanos, el dirigente emitió un comunicado.
Aunque estuve orgulloso de nuestros candidatos y la manera en la que manejaron el debate esta anoche, el desempeño de los moderadores de CNBC fue extremadamente decepcionante y le hicieron daño a su cadena, a nuestros candidatos y votantes, remarcó Priebus.
Durante su presentación varios de los precandidatos se quejaron de los duros cuestionamientos de los moderadores John Hardwood, Becky Quick y Carl Quintanilla que en momentos parecían enfrentar unos a otros.
El senador Ted Cruz, acusó a los moderadores de tratar de instigar luchas en jaula y evadió contestar por qué no apoyó la iniciativa presupuestal que elevaría el techo de la deuda, evitaría el cierre del gobierno y calmaría a los mercados, señalando que por ese tipo de preguntas el público no confía en los medios.
Luego que Quintanilla defendiera que su cuestionamiento era válido, CNBC fue señalada por no darle a Cruz la oportunidad de responder cuando finalmente accedió a abordar el tema.
Marco Rubio llamó a los medios la mayor organización política a favor de Hillary Clinton. Por su parte, Donald Trump calificó las preguntas como ridículas.
Chris Christie reprochó que le preguntaran sobre su postura para regular un sitio electrónico de apuestas de la temporada de fútbol americano en lugar de abordar los temas sustanciales para los estadunidenses en consonancia con lo dicho por Ted Cruz.
Reportes de prensa apuntan que Danny Díaz, jefe de campaña de Jeb Bush, confrontó al productor de la cadena cuando aún el debate estaba al aire para quejarse sobe el mal formato del debate.
Brian Steel, vicepresidente de CNBC para Relaciones Públicas, respondió a las críticas este jueves apuntando que la gente que quiere ser presidente de Estados Unidos debería poder contestar preguntas difíciles.
Otros medios y el público a través de las redes sociales han subrayado que la televisora fue la gran perdedora del debate presidencial.