Ligia Velásquez, magistrada del Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia, renunció el miércoles para evitar un juicio de responsabilidades que le sigue la Asamblea Legislativa.
Velásquez se encontraba suspendida por cargos de incumplimiento de deberes, resoluciones contrarias a la constitución y prevaricato; tras la renuncia afirmó que renunciaba por problemas de salud y la “imposibilidad de encontrar justicia”.
Tres magistrados se encuentran bajo proceso además de Velásquez.
El lunes, el juez Gualberto Cusi fue apartado por problemas de salud y la magistrada Soraida Chánez anunció que demostrará que se trata de un juicio injusto y que continuarán peleando para comprobar su inocencia.
“Tenemos entendido extraoficialmente que hoy día concluye este juicio, yo voy a estar ahí para que de una vez termine esto, es lo que quiero”, afirmó Chánez a la misma emisora.
Según la defensa de lo magistrados, estos actuaron de acuerdo a la constitución y a las leyes vigentes por lo que no han cometido ningún delito.
El vicepresidente Álvaro García Linera explicó que el Senado será quien debe decidir si el caso se prescribe o se envía al Ministerio Público tras la renuncia de Velásquez.