En un comunicado dado a conocer este viernes, el Kremlin señaló que el diálogo reciente entre Vladimir Putin y su colega estadounidense puso de manifiesto las diferencias en los enfoques y las evaluaciones de la crisis y de la situación actual en Ucrania.
La noche de este jueves, Putin y Obama sostuvieron una conversación telefónica sobre la crisis en Ucrania, luego que Crimea, cuya población es de mayoria rusa, adelantó que se adherirá a la Federación de Rusia, lo que aumentó las tensiones en la región.
“Rusia no puede ignorar las llamadas de ayuda en este asunto y se actúa en consecuencia, en plena conformidad con el derecho internacional”, indicó Putin de acuerdo con la declaración dada a conocer este viernes, reportó la agencia rusa de noticias RIA Novosti.
El mandatario hizo hincapié en la importancia fundamental de las relaciones Rusia-Estados Unidos para garantizar la estabilidad y la seguridad en el mundo. “Estas relaciones no deben ser sacrificadas por las diferencias individuales, aunque sean muy importantes, sobre los problemas internacionales”, manifestó.
Para el mandatario ruso lo ocurrido en Ucrania fue un golpe de Estado sin respaldo popular, y las nuevas autoridades “imponen medidas ilegítimas en las regiones del sureste, del este y Crimea”.
Ambos líderes han acordado que el secretario estadounidense de Estado, John Kerry, y el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, continuarán sus contactos para intentar acercar posturas.
La crisis en Ucrania comenzó en noviembre con protestas contra el gobierno que se opuso a un acuerdo con la Unión Europea para preferir una asociación con Rusia y después se profundizó cuando la Rada Suprema (parlamento) destituyó al presidente Viktor Yanukovich.
Esta semana la amenaza de secesión en la península de Crimea, donde se encuentra una de las mayores flotas de la armada rusa, escaló el conflicto, luego que hombres armados con uniformes militares se apoderaron de edificios gubernamentales e instalaciones castrenses.
El Parlamento de Crimea votó ayer unánimemente a favor de unirse a la Federación Rusa y convocó a un referéndum para el 15 de marzo, donde los electores crimeos votarán si la península debería mantener lazos con Kiev o unirse a Moscú.
En este sentido, el presidente de la Cámara baja de Rusia, Serguei Narishkin, dijo que apoyarán “una elección libre y democrática de la población de Crimea, en referencia al próximo referéndum secesionista a realizar en la república autónoma de Ucrania.
En una reunión con el presidente del Consejo Supremo de Crimea (parlamento local), Volodymyr Konstantinov, Narishkin señaló que respetará la decisión que tomen los pobladores de la península, ubicada en el mar Negro.