La adolescente sufrió de abuso por parte de un profesor, policía, abogado y ginecólogo cuando acudió a ellos para denunciar.
La víctima originaria del oeste de Kosovo también fue obligada a abortar, pues en una de las agresiones resultó embarazada. Su terrorífica historia comenzó en el 2017 cuando ella tenía 16 años y empezó una relación sentimental con su profesor, quien le prometía matrimonio, pero un día descubrió que era casado y tenía hijos.
Pese a ello, acudió a la policía para denunciarlo, pero a atención no era la que esperaba ya que el elemento de seguridad la amenazó con decirle a sus padres si ella no aceptaba acostarse con él cuatro veces por semana. Esto sucedió durante todo un año, hasta que en enero de 2019 salió embarazada.
El policía la llevó a realizarse un aborto en Pristina, capital de Kosovo. Luego de esto, volvió a denunciar pero, para su sorpresa, el abogado que le asignaron volvió a abusar de ella.
La historia no acabó allí, ya que durante la investigación tuvo que acudir a revisiones médicas y, de esta forma, comprobar las acusaciones que ella mencionaba, sin embargo, el ginecólogo decidió también abusar de la joven.
El hecho ha despertado en los ciudadanos de Kosovo una preocupación hacia la inseguridad a la que se enfrentan las mujeres de esta ciudad que resulta ser conservadora. Incluso, el mismo presidente de la ciudad, Hashim Thaçi lo tachó como “trágico y monstruoso”.