La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró mil 700 kilogramos de carbón vegetal en Tepic, Nayarit, y desmanteló un horno artesanal para su elaboración en Baja California Sur.
En un comunicado, la instancia detalló que en un primer operativo, la delegación de la Profepa aseguró el subproducto forestal en Nayarit, debido a que no contaba con la documentación que avalara su legal procedencia.
Explicó que el producto era transportado en tres vehículos tipo Pick up y que al momento de la inspección no contaban con documentación que acreditara la legal procedencia del subproducto forestal, por lo que los vehículos y el carbón fueron asegurados de manera precautoria.
Los mil 700 de kilogramos de carbón vegetal y las Pick up fueron trasladados a la delegación federal de la Profepa en Nayarit, donde permanecerán en ese lugar para su guardia y custodia.
Mientras tanto, en Baja California Sur, la delegación de la Profepa desmanteló un horno artesanal de carbón, el cual fue abandonado aún sin utilizarse.
Lo anterior gracias a diversas denuncias ciudadanas, lo que permitió también que personal de la delegación de la Profepa asegurara 1.57 metros cúbicos en leña de mezquite, tres palas, un rastrillo de metal, un pico y una hacha, los cuales fueron abandonados en el citado poblado.
Los inspectores federales de esta Procuraduría ubicaron el horno en etapa de preparación, es decir, sin ser prendido todavía, y el cual tenía una capacidad aproximada para mil kilogramos de carbón.
Además, en una tercera actuación, la delegación de la Profepa en Tamaulipas aseguró un vehículo, así como 18 mil 493 kilogramos de carbón, mil 700 kilogramos de leña en rollo y 600 kilogramos de palma camedor.
Durante un operativo forestal en la zona Centro de la entidad, en el que se levantaron nueve actas en materia forestal y de vida silvestre, también se logró el aseguramiento de siete cactáceas, al no acreditar el inspeccionado su legal procedencia.
La Profepa indicó que estas acciones se aplicarán en la entidad de manera sorpresiva, a través del establecimiento de puntos de inspección en zonas estratégicas, con el fin de crear una cultura del respeto a la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable y Vida Silvestre.