El coordinador de las Naciones Unidas en Colombia dijo que el ataque de las FARC a un grupo de militares, que dejó 11 muertos, es un paso atrás en el proceso de paz que llevan adelante el gobierno y la guerrilla en Cuba, mientras la Iglesia Católica insistió en que continúen los diálogos.
“Los muertos… representan un triste paso hacia atrás en la reducción del sufrimiento y (el aumento de) la confianza en el proceso de paz“, dijo el coordinador de la ONU Fabrizio Hochschild a periodistas.
Por su parte, la Iglesia deseó que el hecho no afecte los diálogos. “El proceso (de negociación) por ninguna causa deberá cerrarse. Los diálogos son la puerta de ese proceso y esa puerta no se debe cerrar por ningún motivo”, aseguró monseñor Darío de Jesús Monsalve, arzobispo de la ciudad de Cali, 295 kilómetros al sur de Bogotá.
A medida que pasan las horas se fueron conociendo más detalles del ataque que dejó 11 militares muertos y 19 heridos.
Según detallaron campesinos y soldados que resultaron heridos, el ataque se produjo a la medianoche cuando unos 50 militares dormían en el municipio de Buenos Aires, en el departamento de Cauca y a unos 330 kilómetros al suroeste de Bogotá.