El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, condenó hoy la supuesta ejecución de uno de los dos japoneses secuestrados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Abe emitió este domingo una declaración en la que denuncia el presunto asesinato del rehén Haruna Yukawa y lo califica de “acto de violencia imperdonable”.
Agregó que para su gobierno representa una prioridad la vida humana y que ha utilizando todos los medios disponibles para liberar a los rehenes.
El primer ministro indicó que cuando piensa en el dolor que estará sufriendo su familia, no encuentra palabras para expresar lo que siente, y asegura que está indignado por un acto de terrorismo imperdonable.
Abe exigió de nuevo a los captores que liberen cuanto antes, sano y salvo, al otro rehén, el periodista Kenji Goto, destacó la cadena pública NHK.
En tanto, señaló que nunca cederán ante el terrorismo y que trabarán con la comunidad internacional para contribuir a la paz y la estabilidad del mundo.
El EI, que en un principio exigió a Japón un rescate de 200 millones de dólares para liberar a los dos rehenes, reclama ahora la excarcelación de una iraquí condenada en Jordania en 2005 por un intento de atentado suicida, para dejar en libertad a Goto.