Por Adela Mac Swiney González. Enviada
San Sebastián, 24 Sep (Notimex).- Con una historia sobre la paternidad deseada, constructiva, el cineasta español Marc Recha presentó en San Sebastián su película “Un día perfecto para volar”, protagonizada por su propio hijo Roc y el actor Sergi López.
“Un día perfecto para volar” compite por la Concha de Oro en la Sección Oficial de la 63 edición del Festival de Cine de San Sebastián, norte de España.
El cineasta, de origen catalán y con varias películas presentadas en festivales como Locarno, Cannes y San Sebastián, señaló que su película trata sobre la paternidad deseada, constructiva, “es un juego en el que se desdibuja la frontera entre la vida vivida y la vida soñada, imaginada”.
“Allí entra todo, juego de gigantes, paisajes, los objetos importantes, un papalote, espantapájaros, las viñas, el agua, las rocas, los árboles, objetos animados, dramáticos”, agregó.
Resaltó que la película empezó con la idea de un cuento, “un cuento que le cuento a mi hijo, todo empezó hace muchos años, el cuento de la pelota del gigante, eso empezó en una gasolinera, un juego entre lo real, lo ficticio, un juego entre espejos, de aprendizaje de ida y vuelta”.
Además, dijo, quiso trasladar a la película la paternidad entendida como algo positivo pues “estamos acostumbrados en el cine al patriarcado, a una paternidad atormentada pero en la película nos vamos a otra visión, inclusión aprendizaje, la construcción humana entre un adulto y un chaval”.
El cineasta aseveró que el guión está muy trabajado y de hecho se tuvo poco tiempo para rodar por lo que hubo que buscar la espontaneidad y que todos los personajes tuvieran autenticidad y frescura.
“Abordamos esta historia a través de la transmisión oral del conocimiento, a partir de ahí de un trabajo de observación tremendo, de vivir como padre con él chico, de tener el privilegio de estar con él, a través del trabajo de años de observación con tu hijo”, dijo.
Esto, participando y aprendiendo lo del juego de los espejos “y compartir, observar, construir las cosas que se echan en falta”.
Resaltó que los niños son como un farolillo que desprende una luz para atraer a la gente que se acerque y los primeros son los padres, pero sin imposiciones, con libertad, para que a partir de esto, pueda volar con libertad”, abundó.
Sobre el cine que hace, Recha aseguró que siempre fue un desastre en los estudios, dejó la escuela, “y me baso en que hay que hablar de lo que a uno le rodea. Siempre he imaginado que me gustaría meterme en el cine de género, pero ¿sería capaz de hacerlo?, quizá no, por eso hablo de lo que me rodea”.
Por su parte, Sergi López sostuvo que la base de la película es de una relación de un padre con un hijo, una relación con amigos, “está todo puesto en bandeja para que ocurra algo, pero luego puede aparecer la vírgen o no”.
“Tuve la sensación de que en los pocos días que rodamos el milagro se dio en la mañana y en la tarde, el niño tuvo capacidad de maravillarse en un segundo y ponerse a volar, capacidad que hemos perdido los adultos”, añadió.