Obviamente pensamos que es preocupante, no pensamos que Venezuela debería continuar en esa senda cuesta abajo, señaló Marie Harf, portavoz del Departamento de Estado.
Anotó que Estados Unidos considera que Venezuela no puede resolver sus problemas al criminalizar o aplicar una política de mano dura a la disidencia, y agregó que el gobierno del presidente Nicolás Maduro debería elegir la vía del diálogo por encima de la confrontación.
Machado fue acreditada la semana pasada como representante alterna de Panamá ante el Congreso Permanente de la OEA, donde realizó denuncias sobre la represión en Venezuela desde hace más de un mes, luego que iniciaron las protestas contra el gobierno.
El lunes el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello, anunció que la diputada Machado había perdido su escaño, al considerar que su inclusión en la misión de Panamá fue una violación a la Constitución venezolana.
Aquí apoyamos fuertemente los esfuerzos de Panamá, (Machado) es una líder de la oposición pero creemos que escuchar a un miembro de la legislatura estatal elegido democráticamente sin importar su filiación partidista es consistente con la OEA (y) su historia de apertura y transparencia, agregó Harf.
Por separado, la congresista estadounidense Ileana Ros-Lehtinen indicó que al quitar su escaño a Machado, tanto Cabello como el presidente Maduro reafirman su desprecio por el proceso democrático y su disposición a abusar del poder del Estado para perseguir a los que se oponen a ellos.