Este martes, el presunto asesino Miguel Ángel Reñazgo fue deportado de Costa Rica, donde fue capturado en abril de 2013, informó a los periodistas la directora de la institución, comisionada Aminta Granera.
Diez años después de esa terrible masacre, Miguel Ángel Reñazgo será puesto a la orden de las autoridades competentes, afirmó la oficial.
La matanza ocurrió hace 10 años, durante un ataque a la comisaria policial en Bluefields y ha sido el golpe más fuerte que hemos tenido en nuestra historia (y) en nuestra propia casa, admitió.
Los agentes Juan José Funes, Ruth González, Roger Villachica y Johnny Dometz Henry fueron atrozmente asesinados y degollados, y la teniente Ana Valderama, de 22 años, resultó herida de gravedad, recordó.
Granera dijo que habían gestionado ante las autoridades costarricenses la deportación del presunto responsable del múltiple crimen, quien había huido tras un operativo policial en el que fueron capturados otros seis implicados.
Reñazgo será remitido a los tribunales de justicia acusado por los delitos de asesinato atroz e intento de homicidio.
Recordamos aquella noche con rabia, con dolor (y) prometimos a sus familias que haríamos justicia. La hemos llamado la noche oscura, afirmó la oficial con voz entrecortada.
El hombre, esposado y rodeado de agentes de las tropas especiales encapuchados, fue presentado ante los periodistas en una reunión de los altos mandos de la Policía que se realiza en Managua.