Froilán Barrios, presidente del Frente Autónomo para la Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato (Fadess), y Servando Carbone, coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores (Unete), dijeron a Notimex que ello es una necesidad impostergable para el país.
Es necesario además que se reactiven las zonas industriales, actualmente paralizadas por la falta de materia prima a objeto de reducir las importaciones e impulsar un plan de infraestructura nacional que estimule el empleo, afirmó Barrios.
En opinión de Carbone, la escasa productividad que han tenido las empresas que han pasado a manos del Estado es también motivo de preocupación, ya que las mismas no han logrado cumplir con las metas de producción, por lo que son blanco de críticas.
Hay debilidades en las empresas recuperadas que deben ser superadas, ya que la sustentabilidad de la revolución bolivariana dependerá del desarrollo productivo local y no de las importaciones, advirtió el oficialista dirigente sindical.
Carbone insistió en que es necesaria una reunión entre el gobierno de Nicolás Maduro y los sindicatos para saber cuál es la visión que se tiene sobre esas empresas para hacerlas productivas, así como de cuál va a ser la relación con los trabajadores.
Es necesario también revisar el estado de las tierras expropiadas. Sabemos que hubo una intención del Estado de darle sustentabilidad y pertenencia de tierra al campesino, pero no ha habido supervisión y direccionalidad para que las mismas sean productivas, recalcó.
Barrios, sindicalista de oposición, precisó que el Gobierno de Venezuela debe centrar sus políticas económicas en la desaceleración de la inflación, fenómeno que convirtió el salario de los trabajadores en sal y agua y mermó considerablemente su calidad de vida.
Tanto Barrios como Carbone señalaron que están dispuestos a asistir a un gran dialogo social para definir cuál será el papel de la clase trabajadora en los planes que tiene el gobierno de Nicolás Maduro para mejorar la condición de vida de todos los venezolanos.