Un agente de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos se declaró culpable ante un tribunal federal en San Diego, California, de contrabando e intento de distribución de drogas, informaron medios locales.
Noé López, con 10 años de servicio en la corporación, se declaró culpable del contrabando e intento de distribución de una maleta de metanfetamina y otra de cocaína.
De acuerdo con fuentes judiciales, López podría enfrentar entre una pena mínima de 10 años de prisión por cada uno de los cargos y cadena perpetua en una prisión federal.
La audiencia de sentencia está prevista para el 8 de septiembre próximo ante la juez de Distrito de Estados Unidos, Dana Sabraw.
Documentos de la corte señalan que López trabajó fuera de la estación de la Playa Imperial y fue arrestado el 14 de diciembre pasado como resultado de una investigación interna de dos meses.
El agente inició una amistad con un hombre que conoció en una fiesta y más tarde comenzó a comunicarse con él mediante una aplicación de mensajería en línea, en la que López aseguró que podría contrabandear drogas dejadas en puntos estratégicos a lo largo de frontera y le dijo al hombre que lo haría por una cuota.
El hombre transmitió esta información a la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos y se convirtió en una fuente confidencial y colaboró con las autoridades para llevar a cabo dos operaciones de contrabando con droga “falsa” a fin de lograr la captura de López.
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