Berlín, 17 Ene (Notimex).- El neonazi Partido Nacional Democrático (NPD, por su sigla en alemán) seguirá vigente pese a que persigue sin duda objetivos anticonstitucionales, dijo el presidente del Tribunal, Andreas Voßkuhle, en la audiencia de sentencia.
“Sin embargo, añadió, actualmente se carece de indicios concretos de peso de que pongan en riesgo el orden constitucional de Alemania y su estado de derecho”.
El Consejo Federal de los gobiernos de los estados de la Federación alemana, el Bundesrat, perseguía desde 2013 que el Tribunal Constitucional prohibiera la NPD, pero no lo consiguió.
Se trata del segundo fracaso de prohibición del partido de tendencia neonazi, pero por motivos distintos.
En 2003 fracasó una solicitud conjunta por el Bundesrat, el Bundestag y el gobierno federal sobre el uso de agentes encubiertos en ese partido.
El Alto Tribunal no examinó entonces si la ideología era correcta respecto a la Ley Fundamental alemana.
Desde la perspectiva del país, la NPD es una amenaza para el orden democrático, pero en Alemania los criterios establecidos para la prohibición de un partido, son muy altos.
Para realizar la prohibición de un partido político se debe poder demostrar que persigue “a juzgar por sus objetivos o por el comportamiento de sus miembros, dañar o eliminar el orden democrático de libertades o la existencia de la República Federal de Alemania”.
En opinión del Tribunal Constitucional alemán, el NPD no puede amenazar gravemente la democracia porque es electoralmente minoritario, motivo por el cual se denegó la sentencia.
El partido no ha sido capaz de estar permanentemente representado en el parlamento estatal, en decir, de contar con fracción parlamentaria den el Bundestag.
También en los parlamentos locales no hubo influencia decisiva del NPD en la toma de decisiones políticas. No es de esperar que esto cambie.
El Tribunal Constitucional estimó que, en términos generales, el NPD tiene poca influencia en la ciudadanía alemana.
El hecho de que el NPD sea racista, antisemita y contrario a la Constitución no es motivo suficiente para prohibir su vigencia.
En Alemania, el Tribunal Constitucional a lo largo de su historia prohibió dos partidos.
La primera fue en 1952 al Partido neonazi Socialista del Reich, heredero del partido de Hitler (el NSDAP) en la Alemania de la posguerra.
Así como en 1956 al Partido Comunista de Alemania, el KPD por sus siglas en alemán.