Aunque la ACP había fijado el martes 18 como fecha límite para tomar una decisión de continuar las obras con el consorcio o romper el contrato, convino con el Grupo Unidos por el Canal (GUPC) en retomar las conversaciones este miércoles. En medio de incertidumbre por la falta de información, la ACP afirmó que las posiciones entre las partes se mantienen distantes.
El administrador de la ACP, Jorge Quijano, reveló hace una semana que había llegado a acuerdos en principio con el GUPC, integrado por la española Sacyr, la Italia Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA, pero hasta ahora ningún avance se concretó. En el momento de estructurar por escrito esos acercamientos, resaltaron serios desacuerdos, reveló la ACP en su última comunicación mientras que el GUPC ha mantenido silencio.
La ACP consideró que esta semana es crítica para tomar una decisión en función de que el proyecto se reinicie lo antes posible y así se lo transmitió a los representantes del contratista en las conversaciones telefónicas del martes.
El GUPC suspendió los trabajos el 5 de febrero pasado al argumentar falta de liquidez por sobre costos de mil 600 millones de dólares en el contrato por tres mil 221 millones de dólares obtenido en 2009 para construir el tercer juego de esclusas del Canal de Panamá. El grupo constructor aceptó que sus reclamos sigan las tres instancias establecidas en el contrato para resolver diferencias aunque en principio pretendía negociar fuera del convenio, según Quijano.
La ACP propuso que cada parte desembolse 100 millones de dólares para reanudar los trabajos y que se defina la participación de la aseguradora Zurich American, tenedora de una fianza de cumplimiento de 400 millones de dólares. Antes de estallar el conflicto, la ampliación, con un avance global del 70 por ciento, sufría un retraso de unos nueve meses, aunque ahora si existe un pronto acuerdo estaría lista a finales de 2015, según Quijano.
El contrato con el GUPC estableció finalizar los trabajos el 21 de octubre próximo, en coincidencia con la celebración este año de los primeros 100 años de operaciones de la actual ruta interoceánica. La ampliación para añadir un carril adicional a los dos existentes inició el 3 de septiembre de 2007 con un presupuesto de cinco mil 250 millones de dólares.