México, 4 Dic (Notimex).- La Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional (OSIPN), bajo la dirección de Arturo Diemecke, ofreció el oratorio de El Mesías, de Georg Friedrich Handel, ante cientos de personas que se reunieron en la Plaza Lázaro Cárdenas, en Zacatenco.
La lluvia, que por momentos caía con intensidad, no impidió que la agrupación dirigida por Diemecke ofreciera el primero de dos conciertos con el que cierra su Temporada Dame Cinco y el festejo por el 50 aniversario de su fundación. La segunda función será este viernes en el mismo lugar.
El recital contó con la participación de Angélica Alejandre (soprano), Gabriela Flores (mezzosoprano), Juan E. Guzmán (tenor) y Juan Carlos Heredia (barítono), así como el Coro Alpha Nova del IPN, dirigido por Armando Gómez, y el Coro de la Secretaría de Marina Armada de México, bajo la dirección de Ricardo Córdova.
El oratorio, considerado la obra maestra que reúne música y tradición, se interpretó de manera excelsa con obras que abordan los pasajes religiosos como el nacimiento del Niño Jesús (Nacimiento humano y con Reyes Magos), Jesús adulto, crucificado y el Aleluya.
Alrededor de unas 130 músicos, entre los integrantes de la orquesta, los coros y los solistas, tocaron y cantaron juntos para deleitar a un público atento a la ejecución, y a un costado del escenario la interpretación actoral de jóvenes vestidos de ángeles y de niño Jesús.
La llegada de Los Reyes Magos al escenario dio el toque navideño que captó la atención del público, sobre todo de los niños presentes.
Más de 250 años han transcurrido desde que Georg Friedrich Händel creó El Mesías, pieza que ha sido calificada como una magna obra de la música de concierto.
Este oratorio acompaña la tradición de las fiestas decembrinas en las salas de concierto y las iglesias del mundo, con el ya conocido Aleluya, haciendo partícipe al público en esta creación musical que hace referencia a diversos pasajes de la vida de Jesucristo.
El autor acostumbraba interpretar El Mesías en la época de Semana Santa y no en temporada navideña, pues los textos bíblicos seleccionados por su amigo Charles Jennens la dividen en tres partes:
La primera hace alusión al Adviento y Nacimiento de Cristo; la segunda ilustra la Pasión, Resurrección y Ascensión; y el último fragmento relata el Juicio Final y el Amén.