Un total de 96 materiales compitieron en el concurso Mujeres Indígenas y Seguridad Alimentaria de América Latina y el Caribe. Mujeres indígenas mostraron su talento detrás de la cámara, y una indiscutible ganadora fue una mujer zapoteca originaria de Oaxaca.
La temática de las imágenes se centró en las actividades diarias de las mujeres para preparar alimentos, recolectar y cosechar o labrar la tierra.
El requisito para poder formar parte de este concurso organizado por la Organización de las Naciones Unidas era que las fotografías debían ser tomadas por mujeres indígenas.
El primer lugar se lo llevó Jaqueline Roque Candelaria, una mujer zapoteca originaria de Oaxaca, México. Alicia Roxana MucúChoc del pueblo Maya Q’echi’ de Guatemala, y a Rosa Ajrota Inquilla del pueblo Aymara de Perú.
Estas fotografías se exponen como parte de la galería Mujeres Indígenas de México: Tierra y Territorio y serán exhibidas durante un mes en el Instituto Nacional de las Revoluciones.
Esta es la fotografía de la mujer zapoteca que ganó el concurso
“Las mujeres indígenas de la mixteca oaxaqueña son pilares en la producción del café, realizan tradicionalmente la cosecha, limpieza y selección de los granos. De sus ventas obtienen el sustento familiar. En sus manos, no solo están marcadas las huellas del trabajo arduo sino también la conservación de sus recursos, cultura e historia; en sus ojos reflejan el amor por la tierra, este mismo amor que debe ser conservado y transmitido a las nuevas generaciones”, expresó Jaqueline Roque Candelaria, mujer zapoteca ganadora del consurso.
Puedes consultar las fotografías del concurso dando click aquí.
Fuente:Flickr FAOALC Autora: Ingrid Lorena Coló Cocolajay Título: Amaranto
Empoderar a las mujeres indígenas
Este concurso tiene como fin visibilizar las múltiples formas en las que las mujeres contribuyen al desarrollo económico, social y a la alimentación de sus comunidades, como expresó Guadalupe Martínez, Coordinadora de NOTIMIA.
Bajo el eslogan, #MujeresIndígenas, mujeres visibles, la campaña hace un llamado a los gobiernos, comunidad internacional, academia, sociedad civil, medios de comunicación y a las mismas comunidades indígenas a hacer visible la contribución de las mujeres indígenas al desarrollo social y económico en datos desagregados y en las políticas públicas.