Ciudad del Vaticano, 2 Nov (Notimex).- La prelatura pontificia del Opus Dei tomó hoy distancia de un clérigo español asociado suyo y que fue arrestado en el Vaticano por un escándalo de filtración de documentos confidenciales
La oficina en Roma de La Obra, como se le conoce a esa institución eclesiástica, manifestó sorpresa y dolor por la noticia del arresto de Lucio Ángel Vallejo Balda, que tuvo lugar el pasado fin de semana en el marco del escándalo titulado Vatileaks 2.
El Opus Dei no dispone de ninguna información sobre el caso. Si la acusación se demostrase cierta, sería particularmente doloroso por el daño hecho a la Iglesia, indicó una declaración oficial.
Reconoció que Vallejo Balda pertenece a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, una asociación de presbíteros intrínsecamente unida al Opus Dei, pero aclaró que la prelatura no puede intervenir ni en el ministerio pastoral ni en los trabajos que los socios desarrollan en sus diócesis o en la Santa Sede.
Insistió que la única misión de esa sociedad es el acompañamiento espiritual de sus miembros.
Recordó que Vallejo Balda fue llamado a trabajar en Roma por el Vaticano (en tiempos de Benedicto XVI), con la anuencia del obispo de su diócesis: Astorga en España.
La prelatura del Opus Dei no intervino ni supo de esa decisión hasta que se hizo pública: los superiores de Vallejo son los de la Santa Sede y el obispo de la diócesis donde está incardinado (Astorga), aclaró.
Nacido el 12 de junio de 1961, Vallejo Balda cursó su carrera eclesiástica en España e inició su ministerio en su diócesis de Astorga, demarcación eclesiástica de la cual fue designado administrador general en 1991.
Allí fue también secretario del Consejo Diocesano para los Asuntos Económicos, administrador del Instituto Sagrada Familia, director del Consejo de Administración de la Mutual del Clero y Administrador del Colegio Diocesano de San Ignacio.
En septiembre de 2011 Benedicto XVI lo nombró como secretario de la Prefectura de los Asuntos Económicos de la Santa Sede. Desde entonces fue catalogado como una de las estrellas nacientes de la Curia Romana.
En 2013 el Papa Francisco volvió a confiar en él como secretario de la COSEA, una comisión instituida en julio de ese año para asesorarle en la reforma a las estructuras administrativas y económicas de la Santa Sede.
El propio Vallejo Balda propuso a Bergoglio la integración de Francesca Chaouqui, asesora en comunicación, como parte de ese organismo y finalmente la mujer fue incluida.
Ambos tuvieron acceso a un número consistente de documentos reservados que debían mantener en estricta reserva, según lo que indicaba claramente el decreto (quirógrafo) con el cual Francisco conformó la comisión.
Ellos dos fueron arrestados el pasado fin de semana en el marco de una serie de investigaciones conducidas por la Gendarmería Vaticana por la sustracción y difusión de noticias e informes confidenciales.
Aunque la mujer fue puesta en libertad por colaborar con la justicia vaticana, la situación de Vallejo Balda está siendo analizada por los fiscales papales.
Los documentos filtrados por el clérigo serían los que le permitieron a dos periodistas italianos, Emiliano Fittipaldi y Gianluigi Nuzzi, escribir dos libros sobre las finanzas vaticanas que saldrán a la venta esta semana.