Para ultimar detalles sobre la conferencia “Ginebra 2”, desde esta mañana se encuentra reunidos en el Palacio de las Naciones el mediador internacional de Naciones Unidas (ONU) para Siria, Lajdar Brahimi, y representantes de las diplomacias de Estados Unidos y Rusia. Se espera que en esta reunión se pueda acordar una fecha para la conferencia de paz y se defina quienes asistirán a la misma ya que un punto de controversia es que Rusia insiste en la participación de Irán.
El objetivo primordial de Ginebra 2 es fijar una hoja de ruta para lograr una transición política, poner alto al fuego y garantizar el acceso de organismos humanitarios para asistir a los más afectados por la guerra civil.
Por parte de Estados Unidos se encuentra la secretaria de Estado adjunta Wendy Sherman y por parte de Rusia los viceministros rusos de Exteriores, Mijaíl Bogdanov y Guennadi Gatílov, así como el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Políticos, Jeffrey Fektman. Una vez que concluya la reunión trilateral se incorporarán representantes de los otros tres países del Consejo de Seguridad Francia, Reino Unido y China.
En la última parte de la reunión participarán representantes de Turquía, Líbano, Jordania e Irak, países vecinos de Siria que han tenido que enfrentar las dificultades de acoger a más de 2.5 millones de refugiados que huyen del conflicto armado que amenaza con propagarse a la región.
La reunión de este martes se da en condiciones en las que de acuerdo con el portavoz de la Oficina de Coordinación para Asuntos Humanitarios de la ONU, Jens Laerke, “el desastre continúa en Siria”. En rueda de prensa en Ginebra Laerke señaló que de los 9.3 millones que requieren asistencia humanitaria básica, 6.5 millones son desplazados internos.
La población de Siria, que asciende a unos 23 millones de personas, sufre una situación humanitaria que se deteriora de manera “rápida e inexorable”, destacó. Según Laerke desde enero solamente han podido llegar 34 convoyes con ayuda, 16 de ellos han podido llegar a terrenos de la oposición y 18 a lugares en los que todavía no está definido quién tiene el control. Operan en el país 15 agencias de la ONU y 15 organizaciones no gubernamentales y el acceso a la población sigue siendo uno de los principales problemas.
Con respecto al fondo de urgencia para Siria, para el cual las agencias humanitarias han solicitado mil 400 millones de dólares, han recibido el 57 por ciento. Si se contara con más apoyo económico, con el permiso del gobierno y de las partes en conflicto, se podría enviar “de inmediato” mucho más ayuda para los civiles, explicó Laerke.
Admitió que la situación de la población civil en zonas de enfrentamientos en donde no tienen acceso a alimentos, medicinas, ni asistencia básica es verdaderamente alarmante . La guerra en Siria ha tomado un rumbo “en contra de toda ley humanitaria que puedas imaginar”, exclamó.